En Noviembre pasado celebramos 6 años de haber lanzado la primera versión de mi Colombia Travel Blog con la esperanza de que el mundo mirara a Colombia con otros ojos. Ojos de aventura, naturaleza, riqueza y no de guerras, narcotráfico y guerrillas. En muy poco tiempo nos posicionamos en Google como referente número uno de información en inglés sobre Colombia y gracias a esto logramos la misión que me había puesto desde el 2009, hacer que más y más extranjeros visiten Colombia, se enamoren de ella y se lo cuenten a todos sus amigos y familia.
Desde entonces muchas cosas han cambiado, JL me propuso matrimonio (ver mi propuesta de matrimonio de ensueño aquí), me casé, nació María del Mar, el blog pasó a ser un blog colaborativo, nos mudamos de Buenos Aires a Colombia, el blog siguió creciendo y creciendo como nuestro segundo hijo. Mi rol entonces pasó de ser bloguera y novia a ser viajera, bloguera, esposa, mamá y empresaria. Entre más pasaban los años, más crecían las responsabilidades y los roles, hasta que llegó ese momento donde, sin pensarlo ni planearlo, me fui alejando poco a poco de la escritura y del papel de bloguera que tanto me gustaba, teniendo que dedicarme más a la familia y sobre todo a la parte administrativa de nuestros negocios.
El blog seguía creciendo y ya no era solo de Colombia sino de muchos más destinos del mundo. No sabía por qué, pero me sentía frustrada, insegura, y además sentía que ninguno de esos roles los hacia bien. Me llené de miedos y con ellos me alejé más y más de lo que me gustaba hacer que era viajar y contarlo. Estaba triste.
Me confieso, ¡ya no soy bloguera!
La buena noticia es que el universo es infinito y siempre es el día perfecto para organizarse, cambiar y volver a empezar. Y eso es exactamente lo que estoy haciendo hoy aquí, confesándome y haciéndole duelo a mis debilidades e inseguridades y lo más importante es que me estoy dando la oportunidad de volver a empezar y con la ayuda de todos ustedes, nuestros fieles lectores, amigos y familia, lograr re posicionarme como bloguera, pero esta vez con un enfoque nuevo.
Mi objetivo es ser esa la mamá viajera que, a través de sus historias, inspira a otros a viajar, solos o a viajar con niños. Pero, sobre todo, a que nos demos ese momento de caer y volver a levantarnos, a perdonarnos y volver a comenzar. Somos seres humanos en proceso de construcción, no estamos terminados.

Quiero inspirarlas (e inspirarlos) a hacer el duelo de perder nuestra libertad. Tener hijos no es fácil, nos cambia toda la vida, es diferente. Eso lo convierte en una oportunidad maravillosa para aprender de nosotros mismos, para modificar algunas cositas, organizarse, pero sobre todo para seguir viajando.
También quiero inspirar a esas mamás a que se animen a viajar solas, ¡Vamos que si se puede! Necesitamos darnos un espacio para nosotras solas, para hacer esas cosas que nos apasionan de verdad y que de pronto hemos dejado en un segundo plano porque siempre hay algo más importante. En mi caso es la equitación y el buceo. Yo tengo la fortuna de entrenar dos veces por semana, ese es mi espacio, mi terapia, mi roca en la agenda, es inamovible. Todo se puede lograr comunicándose, JL y Maria del Mar entienden y respetan lo importante que son esos espacios para mi. Por ello me siento muy agradecida y con muchas ganas de retomar las riendas, bajo un nuevo rol de este camino que se llama Colombia Travel Blog por Marcela, la mamá viajera.
Gracias por leernos y compartir nuestras historias.
Marcela, mamá viajera
Luna Puentes on
Me caíste como un ángel, recién tengo una conversación fuerte con mi padre en donde me llama egoiste y me recalca que estoy abandonando a mi hijo porque me pienso ir a chile 3 meses, la verdad me emociona él hecho de seguir mis sueños de aprender a moverme en otros sitios lejos de mi país para continuamente poderlo hacer con no hijo pero por otro lado siento que mi papa tiene 100% la razón y no se que hacer
Julieta on
Hola Marcela! Me encantó lo que escribiste.. Hay que animarse a caminar la vida y encontrando el equilibrio de lo que nos apasiona y de la nueva mujer que somos después de tener hijos..
Te cuento que con mi compañero y nuestra hija Eva de un año y medio estamos por salir a viajar desde Villa Gesell, en nuestra kombi. Primero pensamos por Argentina y después seguiremos por el resto del mundo!
Te sigo por este medio. Gracias por compartir!
Marcela on
!Hola Julieta¡ Que rico saludarte y que rico saber que se van de viaje con la pequeña. Me parece fantástico viajar en la Kombi, eso sin duda, facilita la vida un montón. Por favor mándanos una foto de los 4 (incluida la Kombi ;)) cuando estén en algún lugar perdido de sur américa. Abrazos
Tereza on
Hola Marcela! Te agradezco mucho tu post. Aunque, como escribes, ya no pasas tanto tiempo escribiendo, deberías hacerlo de vez en cuando 🙂 Te voy contando como lograré balancear mi maternidad con los deseos de viajar. Estoy embarazada con mi primer bebé y claro, uno tiene muchos miedos y está muy inseguro. Aunque sé, que muchas cosas van cambiar, dentro de mí hay una parte que sigue sonando…
Saludos desde la República Checa, ya estoy empacando mi maleta para Colombia.
Marcela on
Hola Tereza y muchas gracias por tu mensaje. Nunca pares de soñar ni de viajar, cuando llegue el/la bebe solo vive el día a día. Las cosas si cambian, solo tenemos que adaptarnos y seguir nuestra intuición porque ella, y la vida nos va llevando donde tenemos que estar. Yo seguiré tu consejo y voy a escribir mas seguido, ya tengo todo un plan para escribir sobre temas que nos lleguen a las mamás.
Abrazos y bienvenida a Colombia!
Flac_k on
Marcela! que lindo lo que escribes, hay que darse libertades y aceptar los sentimientos. Que bien que inspires a seguir viajando y a encontrar el equilibrio con la maternidad, no es fácil, pero hay que intentarlo, sacando momentos para el placer personal.
Bravo mamá viajera!!!
Marcela on
Hola Andrea y millones de gracias por tu mensaje. Si, hay que seguir pa´lante como el elefante! (jejeje). Espero que te haya inspirado de verdad para seguir con tus proyectos y también a seguir viajando.
Abrazos
Marce, mamáviajera